jueves, 2 de junio de 2016

ENSAYO Génesis Bonilla Sección 002

REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA
UNIVERSIDAD PEDAGÓGICA EXPERIMENTAL LIBERTADOR
INSTITUTO PEDAGÓGICO DE CARACAS
ESPECIALIDAD: EDUCACIÓN PREESCOLAR
ASIGNATURA: NEUROCIENCIA DIVERSIDAD E INCLUSIÓN EN LA EDUCACIÓN INICIAL
SECCIÓN: 002   







ENSAYO
CONOCIMIENTO DE LA NEUROCIENCIA PARA POTENCIAR EL DESARROLLO DE LOS NIÑOS/AS.








Profesora: Dorys Alleyne                                                               Estudiante:
                                                                          Génesis Bonilla C.I 24.530.274                                                                                     

Caracas, Junio de 2016


            El cerebro de un recién nacido representa sólo un cuarto del tamaño del de un adulto, y en todo el transcurso de su infancia presenta un crecimiento intensivo y masivo de neuronas. Las primeras áreas cerebrales en madurar son las más básicas, relacionadas con la información visual o con el control motor de los movimientos. Luego se desarrollarán las del lenguaje y la orientación espacial. Por ello es importante la comprensión del desarrollo del cerebro, ya que el mismo permite abordar problemáticas claves para el aprendizaje, tales como la memoria, atención, alfabetización, comprensión de textos, cálculo, interacción social, impacto emocional e incluso qué rol juega la motivación en el niño.
            En esos primeros momentos, meses y años de la vida, cada toque, movimiento y emoción de un joven niño se traducen en una explosión de actividad eléctrica y química en el cerebro, en donde miles de millones de células se están organizando en redes de aprendizaje que requieren millones de millones de sinapsis entre ellas.
            Los factores como la nutrición adecuada, buena salud y agua limpia; el estímulo temprano; y las experiencias e interacciones con padres, miembros de la familia y otros adultos, influyen con mucho impacto en el proceso por medio del cual se desarrolla el cerebro del niño. Teniendo en cuenta, que así como sea el desarrollo del niño durante este período, se fijará ese estado para posteriores sucesos en la escuela y el carácter de adolescente y de adulto (UNICEF, 2001).
            En resumen, durante el desarrollo temprano del cerebro, los genes promueven a que las neuronas formen miles de millones de millones de conexiones sinápticas. Esas conexiones son finamente ajustadas por la actividad eléctrica de las neuronas. Las conexiones útiles son mantenidas o agregadas en donde otras frecuentemente desaparecen. La investigación científica ha mostrado que muchas funciones del cerebro tienen un “período crítico” durante el cual los afinamientos de estos tienen lugar –usualmente los primeros pocos años después del nacimiento. Los científicos consideran, que con excepción por las áreas involucradas con la memoria, las funciones del cerebro son usualmente estables después de ese tiempo (SFN, 2001e).



            Cabe destacar que la neurociencia estudia el sistema nervioso, avances sobre el pensamiento, emoción y conducta humana (SFN, 2001a), y es hasta en los últimos diez años que está aportando más conocimientos sobre el cerebro que en toda su historia: información sobre su desarrollo, los genes que lo regulan, la conformación de redes neuronales de aprendizaje, etc. Por ello la función de la neurociencia es la relación entre la mente, la conducta y la actividad propio del sistema nervioso, cómo la actividad cerebral se relaciona con la psiquis y el comportamiento, su estudio nos hace comprender nuestros comportamientos y los procesos de aprendizaje, así como también la aplicación de herramientas que ayuden a la modelación de los estados emocionales.
                        Después del nacimiento, la mejor forma de nutrición es dar de amamantar al bebe. La leche humana provee alimento perfectamente digerible que contiene nutrientes esenciales para el crecimiento y desarrollo de todas las partes del cuerpo. Las investigaciones han mostrado que dar de mamar es de calidad superior para el crecimiento del cerebro y protección contra infecciones, alergias y muchas enfermedades. (YNHH, 2002).
            Cabe destacar que la carencia de adecuada nutrición en el útero o en los primeros años de existencia del niño puede interferir seriamente con el desarrollo cerebral y esto puede llevar a desórdenes neurológicos y de conducta, incluyendo discapacidad para el aprendizaje y retardo mental (Children & Families, 2000).
            Es de suma importancia la Política del Estado en el proceso de atención integral al desarrollo neurocerebral de los niños, según la UNICEF (2001), esto redundará en lo económico: en mejores estándares de vida cuando sean adultos, mayor productividad sobre su ciclo de vida, menores costos en educación, cuidados de salud y en los servicios de rehabilitación social; en lo social: permitirá la reducción de las disparidades sociales y económicas y las desigualdades de género; en lo político: la posición de un país en la economía global depende de la competencia de su gente y esas competencias se fijan temprano en la vida de los niños.



            El desarrollo neurocerebral del niño(a)] obedece al plan genético, en el cual los genes se activan o desactivan de acuerdo a factores del ambiente externo, siendo de mucha importancia los que tienen que ver con la nutrición-salud, el estímulo temprano y el amor familiar, lo cual potencia las habilidades neuronales del niño para un crecimiento equilibrado física y emocionalmente.
            Por ello la neurociencia forma parte esencial para no solo la obtención de aprendizajes si no para el desarrollo emocional, social, moral incluso en lo que se refiere a aspectos económicos y políticos que irán surgiendo a medida que vamos creciendo. Cabe destacar que desde el embarazo se ve este importante desarrollo siendo los primeros años de vida los más importantes o relevantes para el crecimiento de los niños y niñas.
            Como representantes adultos siendo maestros incluso los mismos padres  debemos tomar en cuenta la importancia que tiene estimular el desarrollo de esas neuronas que forman parte de nuestro crecimiento y que estarán presentes a lo largo de la vida. Hay que tomar en cuenta que pueden existir ciertos factores que afecten dicho desarrollo como lo es la mala alimentación incluso la calidad de los lípidos en los alimentos que muchos desconocemos y los mismos afectan enormemente el desarrollo del niño(a)
            La neurociencia es la base de todo aquel sistema en el cual nos desenvolvemos día a día, por ello es tan importante como se trabaje en los primeros años de vida ya que es la misma la que nos lleva a obtener ciertos aprendizajes y ciertas conductas que nos forman como personas.     El amor que corresponde a la parte emocional siendo la misma la base para lo social y cognitivo, incluso lo moral es de suma importancia para la neurociencia ya que si no hay un equilibrio en lo emocional, eso afectara el desarrollo integral de los niños y niñas. Por ello siempre debemos tomar en cuenta cómo influye el desarrollo cerebral de los niños(a) para su crecimiento y que el mismo es la base para lograr los aprendizajes o conductas deseadas.
            Por último es importante que no solo la política de estado se preocupe por brindar una atención integral al desarrollo neurocerebral si no que como maestros y padres le brindemos a los niños(a) un mejor desarrollo en base a la neurociencia ya que la misma es esencial para el buen funcionamiento de su sistema.

Referencias Bibliográficas

http://saludyeducacionintegral.com/ Valeria Patti Gelabert. Psicóloga Clínica, especialista en Neuropsicología y rehabilitación cognitiva en jóvenes y adultos. (7 junio, 2015)

2 comentarios:

  1. Buen ensayo solo recomiendo cuidar el espaciado entre algunos de los párrafos, en momentos interrumpe un poco la continuidad de la lectura

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