martes, 5 de julio de 2016

Diversidad e Inclusión, la mejor forma de hacer educacion


República Bolivariana de Venezuela
Universidad Pedagógica Experimental Libertador
Instituto Pedagógico de Caracas
Departamento de Pedagogía
Cátedra: Educación Preescolar
Materia: Neurociencia, Diversidad e Inclusión
Sección 004

Diversidad e Inclusión, 
la mejor forma de hacer Educación

La diversidad es un tema que involucra a todos los seres humanos, ya que desde que existió la raza humana todos han sido diferentes, es decir, las personas se distinguen por una serie de características, capacidades, y disposiciones especiales, que son las que lo hacen único y lo diferencian del resto de la especie. La diversidad es un hecho real que abarca todo el entorno sociocultural, en el que se resalta la escuela, donde lo evidenciamos diariamente y que es un tema de discusión y análisis que incluye a todos los factores educativos, como la familia, la escuela y la sociedad, donde a menudo se etiquetan a los niños y niñas sobre su manera de aprender, donde el verdadero papel del docente es descubrir por qué esos niños son así, cuáles serían las causas por las que “no aprenden” y que estrategias se deben emplear para que los niños desarrollen sus habilidades y destrezas mediante un aprendizaje óptimo y eficaz.

El docente capaz de atender la diversidad, es el docente preparado para tener en cuenta la realidad de su estudiantado, de responder adecuadamente a las diversas necesidades y capacidades de sus estudiantes y los ayuda, por tanto, a progresar. Atender la diversidad escolar supone valorar y favorecer a cada alumno por ser quien es, sin ningún tipo de discriminación por razón de sexo, procedencia, raza, nivel social, sobredotación o discapacidad. Una escuela, una educación de calidad, es aquella que ayuda a la mejora, en aprendizajes y actitudes, de cada individuo y ello requiere la adaptación de currículos, metodologías didácticas, materiales y recursos a las necesidades y capacidades diversas de los niños y niñas.

La realidad social ha sufrido en las últimas décadas muchos cambios significativos en cuanto a la diversidad, entendida desde dos puntos de vista: ya sea diversidad de procedencia cultural, de clase social, de lenguaje; o ya sea de capacidades, de ritmos, de motivaciones e intereses. Ejemplo de ello es que en las escuelas a pesar de los cambios todavía se observa la manera de homogeneizar a los grupos para segregar a los grupos especiales, niños distintos o que no aprenden.

Esta inevitable e indiscutible que la realidad obliga a modificar los principios y de las prácticas dominantes tradicionalmente a lo largo del tiempo la escuela y la educación, es por ello que la búsqueda de vías nuevas y efectivas de tratamiento es una manera de dar respuesta a las demandas de los alumnos. La diversidad de los alumnos puede obviarse, esconderse y/o eliminarse, pero en cualquiera de estos casos creara problemáticas nuevas y dificultades, sino se atienden correctamente, desde el respeto, la tolerancia y la igualdad de oportunidades, destrezas, habilidades y potencialidades de cada educando.

 Adaptar la escuela a las necesidades de los alumnos y no al contrario, adecuar la educación a la realidad actual que se vive, no desde la selección y/o compensación para alcanzar una uniformidad y homogeneización supuesta e imposible, sino desde un diagnóstico psicopedagógico y una atención bajo el respeto a la diversidad de todos los niños y niñas, sin excepciones, para lograr una verdadera igualdad de oportunidades, que integre y acerque, desde el conocimiento y la interacción de todos los actores educativos, es el reto actual de la escuela.

 Por tanto solamente la colaboración, el esfuerzo, la convicción y el compromiso con la innovación y el cambio, la escuela y los docentes, no podrían salir de la encrucijada en la que se encuentran, es por ello, que el oportuno seguimiento continuo y sistemático de las demandas de los alumnos así como la creación de nuevos currículos, normas organizativas y metodológicas, la instauración de procesos más flexibles, el tratamiento diferente para lograr más nivelación y el máximo desarrollo posible de las capacidades de cada alumno, el contexto familiar, entre otros factores diversos, son solo algunos de los aspectos que influyen directa o indirectamente, positiva o negativamente, en el aprendizaje y desarrollo de los niños y niñas y es necesario conocerlos para favorecer una labor educativa verdaderamente preventiva.

Es evidente que la preparación del docente es decisiva para enfrentar los cada vez más complejos desafíos que entraña educar, una de ellos, la individualización de la enseñanza como medio para adecuarla a las necesidades de los alumnos en un equilibrio en el trabajo cooperativo y de socialización; y la heterogeneidad de los alumnos y de las respuestas educativas que se les ofrecen para alcanzar los niveles óptimos en el proceso de enseñanza-aprendizaje de cada uno de los estudiantes.

El niño y la niña son el centro en el proceso educativo es la razón de ser de los docentes, por eso, conocer cómo aprenden, en qué presentan problemas, qué necesitan o qué destrezas deben adquirir, es vital para organizar e implementar diversos métodos o procedimientos para cada niño, que estén en función de él, de su aprendizaje y desarrollo, para prevenir o diagnosticar a tiempo e intervenir y asegurar el éxito educativo y personal.

Debemos tener en cuenta que dentro de las necesidades educativas del estudiantado existen unas más complejas y las califican como especiales, tales como las sensoriales, las motoras, las verbales e intelectuales y especialmente hay que tomar en cuenta el entorno social y sobre todo el entorno familiar, ya que existen muchos factores que influyen negativamente en el desarrollo y comportamiento de cada niña y cada niño, es por eso que el docente se debe tomar en cuenta de las condiciones existentes para mejorar la participación escolar, como el grado de vulnerabilidad económico, social, salud, que son los aspectos más importantes dentro del núcleo familiar.

El docente debe tener conocimiento de cada necesidad social del estudiantado, podemos mencionar la ubicación de su vivienda y si la escuela se encuentra en el radio de acción. La condición familiar, el status socio económico, influyen en el comportamiento del estudiantado. Es importante la participación comunitaria en conjunto con la familia y el centro educativo para mejorar las necesidades especiales como el bajo nivel de participación educativa y que el profesorado se involucre en las desventajas y apoye las potencialidades estudiantiles.

Igualmente la familia debe tener una participación activa para que el mejoramiento del desarrollo educativo sea continuo y de esa manera se incrementa  el apoyo a las escuelas, fortalecemos la inclusión educativa y la integración escolar de los alumnos con necesidades educativas especiales.  Debemos tomar en cuenta que se le debe dar continuidad a la no segregación  por razones de sexo, raza, creencias religiosas, ya que esto permite y fortalece la participación de los padres y mantiene una ocupación permanente del sistema educativo.

Como conclusión es importante destacar que la integración escolar con el estudiantado con necesidades educativas especiales les debe garantizar  la igualdad de derechos y la calidad educativa, ya que todo este proceso requiere cautela, moderación, en todo el análisis y preparación para el proceso de preparación para la formación instruccional y educativa. Las escuelas deben disponer la matrícula para la aceptación de todo el alumnado y fortalecer el ingreso del estudiantado con necesidades especiales y que el personal docente mantenga una formación pedagógica y así mantener la integración escolar.

La escuela inclusiva es socializadora por excelencia y valora con propósitos humanistas el desarrollo individual de cada niño de cada niña, mantiene una educación de calidad sin exclusión, garantizando la permanencia del estudiantado en el centro y que desarrolle igualmente la autoestima, pueda valorarse y cubrir su meta, es decir, que desarrolle el alcance máximo de sus capacidades. Debemos también tomar en cuenta que existen casos con deficiencias intelectuales que deben desarrollar sus habilidades en escuelas con personal especializado y que realice una atención más específica, esos son casos con deficiencias severas y profundas y la atención en la escuela inclusiva atendería los casos leves y moderados.


No todo el profesorado esta ganado para la instrucción de la integración escolar,  pero es importante su formación con ética y principios para que asuma responsablemente el desafío y logre la interacción de la familia -  comunidad - entorno del estudiantado y garantizar la socialización y el desarrollo de todos y contando con los recursos didácticos para la enseñanza, ya que la atención de las necesidades del estudiantado es permanente y así lograr las adaptaciones curriculares, ya que esto apoya la repercusión psicológica en la personalidad de los alumnos.

                                                                              Autoras                     
                                                                            Blanco, Wladimar V.-17560738     
                                                                            Flores, Giovanna V.-20872548      
                                                                    Marchena, Johanny V.-20794738  
                                                                   Molina, Adriana V.-22366699        
                                                                            Ramos, Naidelis V.- 21272093      

No hay comentarios:

Publicar un comentario